Pasta asiática, una alternativa rápida de comida sana

Pasta asiática una alternativa rápida de comida sana

Felicidad es salud y vivir sin prisas

A los sesenta subo montañas sin bastón

Ochentón, el Chi me mantiene en forma y fuerte

Con mil libro aún bailan mis ojos.

 

Lu You

 

 

Pasta asiática se puede referir a un sinfín de variedades que tiene su origen en el continente más extenso y poblado de la Tierra. Cuando hablamos de pasta podemos pensar en la variante italiana, fuente rica de formas y texturas o incluso los Spätzle alemanas a base de huevo.

 

Pastas de China y Japón

En los años recientes diferentes pastas asiáticas han entrado en nuestra gastronomía local. Los tallarines se siguen pidiendo al restaurante chino del barrio, pero también se preparan en casa y en restaurantes de cocina creativa. Lo mismo ocurre con el Ramen popular de la cocina japonesa.

 

Los más conocidos aquí son los fideos de huevo, arroz y los más curiosos de celofana. Entra las japonesas podemos nombrar Soba y Somen. Luego están las pastas para rellenar Wanton y Gyoza. Esta, por supuesto, es una lista muy breve.

 

Todas ellas destacan por su rápida preparación lo cual les ha ganado un espacio propio en las llamadas comidas rápidas ya preparadas. Muchos almuerzos en la oficina se resuelven con el acto de añadir agua hervida a una taza de sopa instantánea con “noodles”.

 

Estos instantáneos, como los Yakisoba de Nissin, vienen ya completas con verduras y de muchos sabores, como teriyaki o curry.

 

La receta básica para un instantáneo de pasta asiática

Quien quiera improvisar su propio instantáneo asiático lo puede hacer con mucha facilidad. Un recipiente que pueda soportar agua caliente, y una tapa que cierre bien, es el primer paso. En el fondo va el caldo del sabor preferido, por ejemplo, el caldo de Bovril. Después las verduras de temporada. Por último, llenamos el tarro de fideos de huevo o arroz. A la hora de almuerzo se añade el agua caliente, se deja reposar unos minutos y ya tenemos la comida lista.

Los ingredientes pueden variar a gusto, lo importante es que la colocación en el tarro sigue el mismo orden. Primero el caldo, después las verduras y por último la pasta.

 

Calor en invierno con estos secretos

Ahora en invierno, y siguiendo la tradición china de cuidar mente y cuerpo con la comida, recomendamos los siguientes ingredientes a añadir a la pasta. Aportan calor, sacan el frío de los huesos y fortalecen los riñones:

Hinojo, cilantro, ajo, pimiento negro y jengibre.

Pollo y cordero son carnes buenas para estas fechas igual que judías y batatas.

 

 

Domingo Gutiérrez es distribuidor mayorista de pasta asiática e italiana y caldos en Tenerife.

 

 

Pasta como plato principal y acompañante

pasta albahaca pimiento

«Todo lo que ves, se lo debo al espagueti.»

Sophia Loren

La pasta en las cocinas del mundo

Un alimento básico de cada despensa, la pasta es la base de todo tipo de platos deliciosos. Unos espaguetis con salsa de tomate y los niños están encantados con su almuerzo. Añadimos vino tinto y luz de velas y la pasta se convierte en un plato seductor para una velada romántica. En frío también brilla por su versatilidad, en una ensalada de macarrones con una mezcla de quesos, tomates y aceite de oliva.

No requiere mucho tiempo y combina como base para muchos sabores diferentes. Puede ser fresca o seca, con o sin huevo. El Spätzle alemán es una alternativa a base de huevo, que enciende una y otra vez el debate de si pertenece a la categoría pasta o no. Los noodles chinos, también llamadas mian, muestran que la cultura de la pasta no solo tiene raíces fuertes en Occidente.

 

¿Qué pasta con que salsas?

Aunque siempre es una cuestión de gustos, recomendamos lo siguiente:

Frescas y secas:

  • Pasta fresca con salsas cremosas y base de lácteos. Si lleva mantequilla o leche, le encantaran los raviolis y ñoquis.
  • Pasta seca con salsas de sabor fuerte a base de aceite. Espaguetis, macarrones, rigatoni con una salsa boloñesa, salsa picante de tomate o salchichas.

Finas y gruesas

  • Las pastas finas tipo hilo, espaguetis, cabello de ángel y fusilli van bien con salsas ligeras.
  • Las pastas con forma gruesa tipo fettuccini se acompañan de salsas densas y jugosas.
  • Las pastas tipo tubo, como macarrones, penne y rigatoni con salsas ricas en textura con trozos de tomate, carne molida o salchicha.

Domingo Gutierrez es distribuidor mayorista de pasta en Canarias.

Preparar la pasta es rápido. ¿Pero cómo se prepara bien?

5 pasos con algunos consejos

  • Hervir agua (cantidad de agua perfecta: 1 litro por 100g)
  • Añadir un poco de sal (sube la temperatura de ebullición y añade sabor)
  • Añadir pasta (cuando el agua esté en su punto de ebullición, no antes)
  • Remover de vez en cuando y probar hasta que esté al dente (el tiempo indicado sobre la caja suele ser correcto; remover desde el principio es clave para que la pasta no se pegue. Al dente: la textura es firme pero no dura)
  • Colar (con la ayuda de un colador y mezclandola en seguida con la salsa o aceite de oliva para evitar que se quede pegajosa.

 

 

Recalentar pasta, ¿sí o no?

Se puede, con cuidado, para que no pierdan su textura y sabor al dente convirtiéndose en una masa pegajosa. La cantidad a recalentar se coloca en agua hirviendo durante 40 a 60 segundos máximo. Colar, añadir la salsa y servir inmediatamente.